Cuando observamos a los niños podemos ver un claro ejemplo de conexión con señales de hambre y saciedad. Comen cuando tienen hambre y dejan de comer cuando están saciados. Entonces, ¿cómo llegan muchas personas a la desconexión de estas señales? Todo comienza en la infancia ...dónde se pueden dar situaciones en las que se obliga al niño/a a comer cuando no tiene hambre, a terminar el plato aún cuando ya está saciado y/o comer cada 3h. Bajo estas situaciones no hay malos padres, hay creencias que nos llevan a ello. Algunas de estas creencias pueden ser:
- "Si mi hijo no come...soy mal padre o mala madre".
- "Si no come cada 3h se va a desnutrir". Por otro lado, el consumo reiterado de productos con azúcar , harinas refinadas, aditivos como el glutamato monosodico e-621 y edulcorantes, activan los sistemas de recompensa cerebral creando adicción, y con ello la pérdida de conexión con nuestras señales de hambre y saciedad. Llegados a este punto, ¿cómo podemos reconectar con hambre y saciedad?: En primer lugar debemos evitar productos ultraprocesados con los ingredientes dichos anteriormente, basar nuestra alimentación en materias primas (alimentos) y priorizar aquellos con mayor DENSIDAD NUTRICIONAL: carnes, pescados , huevos y mariscos. El segundo paso consiste en la observación de estas señales. Puedes preguntarte:
- Antes de comer: ¿Realmente tengo hambre física o voy a comer porque es la hora?
- Mientras comes: ¿Sigo con hambre o ya he comido lo suficiente?.
Este paso puede ser difícil al principio. No desesperes, reconectar con hambre y saciedad puede ser un proceso lento. El tercer paso consiste en identificar creencias que te están limitando:
- "Hay que comer 5 veces al día"
- "No puedo salir de casa sin desayunar"
- "Hay que comer antes de ir a dormir"
Una vez identificadas, valoraremos si es una realidad ("si salgo de casa sin desayunar me mareo") o debemos reformularla ("puedo salir de casa sin desayunar, pero es probable que me dé un mareo").
¿Cómo podemos ayudarte?
Desde la nutrición podemos acompañarte en el proceso para reconectar con las señales de hambre y la saciedad, para ello nos basaremos en alimentos reales e investigaremos cuáles de ellos son más saciantes para ti. Incluir estos alimentos en cada comida nos brindará energía constante durante el día y evitará los antojos entre horas. Tras este paso, podremos hacer de manera más sencilla una reflexión sobre tus señales de hambre real y con ello poder disolver las creencias limitantes.
Recuerda que puede ser un proceso lento y por ello estamos a tu disposición para acompañarle durante el proceso.
Maria del Mar López Ruíz.
Nutricionista.